jueves, 1 de enero de 2015

Ramón (tío) se lanza a desestabilizar el PSC-PSOE de Icod, queriendo ser el candidato


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Impresionante de lo de este concejal socialista y director de la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Icod. Hace años era un ferviente cheísta, tanto que hasta se propasó en las confianzas y fue usado como escudero en la tormentosa vida privada del alcalde, cuando Cheo (LTT) se creía por encima del bien y del mal. Pero no hay mal que por bien no venga. Ramón pudo acumular mucho conocimiento del lado oscuro de quien ha destruido el socialismo en este castigado municipio norteño. Y sabe tanto, que si hablara, el que antes era su amigo, iría directo a la trena, sin pasar por la casilla de Salida y cobrar lo que le corresponde. No importa que sea mediocre o como dicen algunos, cortito, da igual. Tiene la naturaleza de las mesas, aguanta todo lo que le ponen encima y no se parte. Pero ahora ha renunciado a que lo usen y está en un momento salvaje, quizás mal aconsejado y aprovechando la ruina del partido y que Cheo (LTT) retrasa la designación de su sucesor o sucesora, buscando acomodarse fuera de sus fronteras, Ramón (tío) se pone a jugar con los cheístas y los críticos, buscando hacer ruido y queriendo ocupar una plaza que no le corresponde en absoluto. Solamente presentarlo y ya está toda la peña del bar Hespérides, el centro de gravedad permanente de Icod, descojonada y asombrada al mismo tiempo. Los socialistas icodenses están en un campo de minas por culpa de Cheo (LTT) y les salva la insignificancia del PP y la total desesperación del candidato nacionalista que no llega, que no despierta simpatías y que va tenso por la calle, forzado, intentando congraciarse con los vecinos, que desconfían mucho, a pesar que ha cambiado su guardarropa. Y en ese campo de minas, personajes como Ramón pueden medrar y soñar falsas esperanzas, favorecido por la derrota de los oficialistas y las dudas de los críticos, que no logran cuajar con el líder que los puede mantener en el poder. Se salvan por el momento con la izquierda alternativa, aunque habría que estar atento a lo que haga Podemos y el resto de partidos. Especialmente Moncho, bastante alicaído y derrotado por unas encuestas que tampoco le son muy favorables. Y eso es lo que da vidilla a quien está más muerto que los zombies que bailan con Cheo Jackson, siempre en el estado de lobo feroz. Hablamos de Ramón (tío), evidentemente.