Un reinado de terror del ‘clan Ruiloba’ instaurado en el Ayuntamiento de Icod (buffff)

Mónica Ruiloba. Secretaria general del Ayuntamiento de Icod de Los Vinos. Fue el brazo armado de Faustino Alegría en el municipio de El Tanque, tanto que hasta el último momento apostó por el alcalde nacionalista, quedándose de piedra, cuando los números electorales desbancaron por fin a este terrible político, que ha llevado a su tierra a sus peores indicadores, ayudado por esta funcionaria. Su fama la ha precedido y llamó la atención de Cheo (LTT), al que le convenía una secretaria tan obediente y tan dispuesta. Y se la trajo a Icod, donde ha dado muestras de ser una magnífica elección para el cheísmo, consagrándose con actuaciones increíbles, indignas de un alto cargo técnico municipal, que debe velar por la legalidad y sobre todo debe parar los desmanes de los políticos. Pues no, parece que no, que ese ni es su camino, ni tampoco su perfil. Y se ha entregado a cosas que no están nada bien, ni ética, ni estética, ni jurídicamente. Ya son varios los atropellos que aquí les hemos relatado. Pero además cuenta con la inestimable ayuda del alcalde y su más que brutal equipo. Por eso existe un ambiente de crispación en el Ayuntamiento de Icod de los Vinos gracias a la gran labor que está realizando la concejala de personal María del Cristo, la cual ha provocado otro altercado el pasado lunes en las oficinas de la secretaría del Ayuntamiento que dirige, por decir algo, la señora Ruiloba. Esta vez le ha tocado a una auxiliar del servicio de Contratación que ha sido maltratada (siguiendo la costumbre implantada por la prima Peña cuando reinaba en la gerencia de urbanismo) por una de las ayudantes de la Ruiloba. La pregunta ante tan terrible incidente surge sola: ¿ordenará Maria del Cristo abrir expediente en esta ocasión? Nos tememos que no y como es ya costumbre en este fisgón, estamos ante una nueva manifestación de la secta Cheista, que se retrata sola en la producción de desmanes y de falta de límites ante la dignidad. Y éste no será ni el primero, ni el último de los asuntos en los que se vean involucrados estos temibles personajes.