sábado, 9 de febrero de 2013

Fidela Velázquez, tras revolucionar al pueblo, ahora se queja de presencia policial (uf)

La alcaldesa de San Juan de la Rambla, Fidela Velázquez, ofreció ayer viernes acompañada de los concejales del grupo de gobierno, una rueda de prensa a modo de balance de gestión de los 18 meses al frente del Ayuntamiento y de despedida ante la moción de censura que se debate el próximo lunes y que acabará con Tomás Mesa (PP) como alcalde gracias a los votos de AIS-CC, según ha publicado SB-Noticias. Explicó que esta rueda de prensa tiene como función el que los medios de comunicación actúen como fedatarios públicos sobre cómo queda el ayuntamiento de San Juan de la Rambla tras 18 meses de gobierno municipal y cómo se lo van a trasladar el lunes a los nuevos gobernantes en una dación de cuentas que cabe mencionar que este grupo de gobierno no tuvo por parte de los anteriores mandatarios. Dijo que en junio de 2011, fecha en la que accedieron al gobierno municipal tras las elecciones municipales tras muchos años de gobierno de AIS-CC, el grupo de gobierno saliente como única dación de cuentas les entregó una bolsa de pins, sin embargo este grupo de gobierno quiere hacer las cosas “como Dios manda”, de modo que este jueves se les trasladó a los vecinos el estado de la cuestión en la que queda muy claro como dejan “la casa” en una larga sesión de reunión vecinal, puesto que sus compañeros de gobierno dieron cuenta de lo ejecutado hasta ahora en sus áreas de gobierno y de lo que está programado hacer en base a los presupuestos del 2013. Velázquez dijo que esta ha sido una semana de recogida de sus enseres personales, pero también una semana de continuación de los trabajos que se están ejecutando, de modo que se inauguró por el área de Cultura una sala de estudios a demanda de los jóvenes del casco que se quejaban de que no tienen biblioteca, igualmente se han inaugurado las nuevas dotaciones de las dos casas de la Juventud de La Vera y San José, se recibió una donación particular de una casa que será destinada a la atención de los mayores rambleros, así como asfaltado algunas zonas que estaban en muy malas condiciones desde hace mucho tiempo. “La vida sigue y esta administración, pese a que nosotros nos vamos, hemos seguido trabajando hasta el último segundo” dijo la alcaldesa, para asegurar que en estos días, concretamente el pasado jueves, el grupo de gobierno se ha quedado elevadamente sorprendido de la inusual presencia policial en el municipio. De este modo, señaló que en la tarde del pasado jueves parecía como si se estuviera en un estado de sitio los alrededores del Ayuntamiento: “Había 7 efectivos de la guardia civil, más varios policías secretos a las cinco de la tarde cuando no había ningún incidente visible y cuando se iba a celebrar únicamente una asamblea vecinal en un edificio municipal a las siete de la tarde”. Critica que además de esa presencia policial de por si intimidatoria, se paraba a los vecinos preguntándoles de manera conminatoria a dónde se dirigían: “Quien les habla, que vivió la dictadura, no recordaba tal estado policial desde hace más de treinta años”, tras lo que recordó que la ley dice que cualquier cuerpo de seguridad estatal tiene que actuar con el principio de congruencia, de oportunidad y de proporcionalidad, sin embargo no le queda otro remedio que decir que la presencia policial de las últimas horas fue incongruente, inoportuna y desproporcionada, como así se lo manifestó al jefe del puesto y así lo ha intentado hacer a lo largo de la mañana de ayer al subdelegado del Gobierno. Fidela Velázquez aseguró que ha sido una vivencia desafortunada, porque no se puede amedrentar a la vecindad en momento complicados, sino darle cauce para que no se sienta frustrada y para que esa frustración no se convierta en un problema de orden público.

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