Hasta el pasado día 7 el Ayuntamiento de Icod de Los Vinos no había abonado aún la nómina del pasado mes de octubre a sus trabajadores, incumpliendo con la obligación legal a que están obligados los empleadores de abonar las nominas, como mínimo, a finales de mes. Muchos de los trabajadores del Ayuntamiento tienen contraídas obligaciones de pago de préstamos, hipotecas o deudas financieras de otra naturaleza que normalmente deben ser satisfechas a finales de mes, o en los primeros días del mes entrante. Muchos de esos trabajadores no pueden hacer frente a sus compromisos de pago sino no reciben a tiempo el abono de sus nominas, en las fechas que en derecho les corresponde. Cuando estas obligaciones no se satisfacen en los plazos establecidos, al margen de la condición de morosos en que quedan los prestatarios, estos deben satisfacer los intereses de demora en que incurren, que por cierto las entidades bancarias carga a unos tipos muy altos. El Ayuntamiento con el incumplimiento de sus obligaciones con sus trabajadores les está causando serios perjuicios, no solo económicos por los intereses de demora que tienen que abonar, sino el perjuicio moral y en su prestigio personal que supone quedar como morosos incumplidores de sus compromisos financieros. No es la primera vez que se producen retrasos en el abono de las nóminas a los trabajadores municipales de Icod de Los Vinos en el último año. Al parecer, y resulta bastante increíble, que las razones que esta vez se dan por parte de los responsables municipales para esta demora es que se carece de medios humanos suficientes para confeccionar la nomina, cuestión que de ser cierta tenía que haberse previsto con antelación para no llegar a este punto. Ante el problema que está suponiendo para los trabajadores este injustificable retraso Somos Icodenses ha dado entrada por registro del Ayuntamiento de Icod de Los Vinos una solicitud, cursada directamente al alcalde de la ciudad, para que se proceda al abono urgente de la nómina del pasado mes de octubre a los trabadores municipales, al tiempo que también solicita se resarza a los mismos del perjuicio económico que se les haya producido por este retraso. Seguramente y gracias a esta presión, ya han cobrado sus nóminas los trabajadores, pero queda en pie toda esta crítica.
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